¿Te animas a probar algo diferente? Te presentamos dos deliciosas recetas de helados inspirados en la vibrante selva peruana, una región llena de color, gente cálida y, sobre todo, frutas exóticas que la representan a la perfección. Con estas recetas, disfrutarás de sabores únicos y refrescantes, perfectos para cualquier ocasión.
1: Helado de Camú Camú
Ingredientes:
- 2 unid Plátanos maduros
- ½ kg Camú Camú (Fruta)
- 4 cda Camú Camú en polvo
- 1 taza Frambuesas
- 400 ml Leche evaporada
- ½ taza Agua hervida fría
- 1 cda Miel
Preparación:
- Primero, lava bien todas las frutas. Pela los plátanos y córtalos en trozos medianos. Colócalos en un bowl y resérvalos.
- En una licuadora, añade los trozos de plátano, Camú Camú (tanto la fruta como 2 cucharadas del Camú Camú en polvo), las frambuesas y la miel. Licúa durante unos minutos hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Si está demasiado espesa, puedes agregar un poco de agua; si prefieres que sea más espesa, puedes añadir más Camú Camú en polvo.
- Una vez que la mezcla esté lista, viértela en un recipiente apto para congelador y deja que repose en la nevera por al menos 7 horas.
- ¡Listo! Sirve este refrescante helado y disfruta de su sabor tropical. ¡Buen provecho!
Este helado combina el dulzor del plátano con el toque ácido del Camú Camú, una fruta rica en vitamina C y antioxidantes. El resultado es un postre nutritivo y refrescante que te transportará directamente a la selva peruana.
2: Helado de Chirimoya:
Ingredientes:
- 500 gramos de chirimoya (la pulpa sin las semillas)
- 200 gramos de leche condensada
- 200 mililitros de nata para montar
- 1 chorrito de zumo de limón
- esencia aroma de vainilla
Preparación:
- Parte las chirimoyas por la mitad y extrae la pulpa, asegurándote de quitar todas las semillas. Coloca la pulpa en un bol grande y añade un chorrito de zumo de limón para evitar que se oxide.
- En un recipiente aparte, monta la nata bien fría junto con unas gotas de esencia de vainilla hasta que quede firme.
- Por otro lado, tritura la pulpa de chirimoya junto con la leche condensada hasta obtener una mezcla suave y cremosa.
- Añade la nata montada a la mezcla de chirimoya utilizando movimientos envolventes, de manera que se integre sin perder volumen.
- Si no tienes una heladera eléctrica, coloca la mezcla en el congelador. Para evitar la formación de cristales de hielo, saca el recipiente cada hora y bate la mezcla manualmente con unas varillas. Repite este proceso durante 3 a 4 horas.
¡Y listo! Una vez alcanzada la consistencia deseada, tendrás un delicioso helado de chirimoya listo para disfrutar.
Este helado es un homenaje a una de las frutas más emblemáticas del Perú: la chirimoya. Con su textura cremosa y sabor dulce, la chirimoya se mezcla a la perfección con la leche condensada y la nata, creando un helado suave y lleno de sabor.
Estas dos recetas ofrecen la oportunidad de disfrutar los sabores exóticos y nutritivos de la selva peruana, con frutas como el Camú Camú y la chirimoya, perfectas para crear postres tropicales y deliciosos. ¡Pruébalas y añade frescura a tu día!
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